DESVELANDO IDENTIDADES

Si estás aquí es para cuestionar los límites del género y
repensar, entender y celebrar todas las identidades.

El género es una categoría compleja con normas sociales
rígidas que perpetúan desigualdades.

LAS RAZONES DE SER KASA TRANS*

son formar, superar barreras y ampliar posibilidades para acompañar, abrazar y vivir el género celebrando todas las identidades trans*. El desconocimiento de realidades distintas a las nuestras nos impide comprenderlas. Cuando no comprendemos levantamos una barrera invisible que nos impide acercarnos a ellas con empatía. La falta de empatía favorece el rechazo, la discriminación y muchas violencias. Esta barrera invisible nos separa y dificulta nuestra convivencia. Necesitamos superar estas barreras y aprender a construir puentes en lugar de muros. Para ello ofrecemos INFORMACIÓN, FORMACIÓN y RECURSOS que aportan una mirada crítica y profunda sobre estas dinámicas, invitando a reflexionar sobre cómo podemos construir una sociedad más inclusiva y equitativa para todas las personas, sin importar su identidad de género.

SI ESTÁS AQUÍ ES PARA CUESTIONAR

los límites del género y repensar, entender y celebrar todas las identidades.

Las personas asignadas al sexo masculino que se identifican como hombres suelen disfrutar de privilegios muy superiores a las de otras personas: las asignadas al sexo femenino, independientemente de si su expresión o identidad de género es femenina, masculina o no binaria, las asignadas al sexo masculino con una identidad o expresión de género femenina o no binaria, y las personas intersex, independientemente de su identidad de género.

Cuestionar los límites que, en nuestra sociedad, se imponen al género, nos permite repensarlo desde un lugar que convierte la rigidez en fluidez y el privilegio en igualdad.

ABRIENDO EL CORAZÓN Y
LA MIRADA

Entendemos la formación transformadora como aquella que abre nuestro corazón a nuevas emociones y cambia nuestra perspectiva. Para lograr esto, no basta con conceptos teóricos; es esencial conocer las experiencias de personas que viven su género más allá de los límites impuestos por la sociedad. Necesitamos comprender que cada persona tiene su propio camino, lleno de retos, obstáculos y logros. Además, es importante ver cómo estas vivencias impactan a quienes las rodean. Conocer estas historias nos permite abrir nuestra mirada y abrazar la diversidad.

PARA ABRAZAR TODAS LAS IDENTIDADES

Acompañar a quienes amamos, educamos o cuidamos nunca es fácil, y es aún más difícil si están explorando o cuestionando su género, o se identifican como personas trans*. Tener creencias rígidas y normativas sobre cómo deben ser los cuerpos y cómo debe expresarse el género, y pensar que quienes viven fuera de estas normas enfrentan un futuro sombrío, dificulta nuestro apoyo. Conocer las experiencias de personas que viven positivamente su género, más allá de los límites impuestos por la sociedad, y aprender de quienes las acompañan, nos ayuda a flexibilizar nuestras creencias y a reducir prejuicios y miedos, permitiéndonos abrazar todas las identidades.

AVANZANDO EN EL CAMINO

A menudo se piensa que cuando una persona se reconoce en una identidad trans*, su destino y las necesidades para alcanzarlo ya están trazados. Sin embargo, en realidad existen mil maneras de sentir, construir y vivir el género. Hay numerosos caminos y, en cada uno, una infinidad de decisiones posibles, a adaptar a necesidades individuales. Conocer las experiencias de otras personas, los caminos que han elegido y las decisiones que han tomado, así como contar con información profesional, facilita identificar las propias necesidades, tomar decisiones más acertadas, avanzando en el camino elegido.

NUESTRA HISTORIA

Muchas de las pequeñas grandes revoluciones comienzan al cruzar puertas inesperadas. Soy Rosa Almirall y quiero contarte algunas de las puertas que crucé hasta crear Kasa Trans*.

En los años 70, estudiando Medicina en Barcelona, abracé el comunismo y el feminismo. Entendí que la salud no puede ser un negocio y elegí trabajar en servicios de salud pública de ginecología y obstetricia para que las mujeres pudieran decidir sobre sus cuerpos, su sexualidad y sus vidas. Esta experiencia me permitió dar formaciones y gestionar servicios de salud sexual y reproductiva con perspectiva de género.

En 2011, nuevas puertas se abrieron, llevándome a cuestionar el género más allá del feminismo. Nació Trànsit, el primer servicio público de salud que desafía la idea de que la identidad de género pueda diagnosticarse y reconoce que las personas trans* deben decidir sobre sus cuerpos, su sexualidad y sus vidas.

En 2015, la comunidad trans* de Catalunya creó la Plataforma Transforma la Salut, defendiendo el modelo Trànsit. Esta iniciativa ha acompañado a más de 6000 personas trans* y sus familias, y ha formado a más de 9000 profesionales de distintos ámbitos.
Ahora, cerca de mi jubilación, cruzo una nueva puerta porque quiero devolver a la sociedad todo lo aprendido en este

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